Puedes llamarme pajarito…soy yo, aunque ultimamente no canto…
“Canta, canta, pajarito…
Canta, canta, tu canción…
¡Ayúdame a calmar
mi angustia y mi dolor,
ayúdame a soñar
que está a mi lado!
Canta, canta, pajarito…
Canta, canta, tu canción…”
“No debí pensar jamás
en lograr tu corazón
y sin embargo te busqué
hasta que un día te encontré
y con mis besos te aturdí
sin importarme que eras buena…
Tu ilusión fue de cristal,
se rompió cuando partí
pues nunca, nunca más volví…
¡Qué amarga fue tu pena!
No te olvides de mí,
de tu Gricel,
me dijiste al besar
el Cristo aquel
y hoy que vivo enloquecido
porque no te olvidé
ni te acuerdas de mí…
¡Gricel! ¡Gricel!”